RED VENEZOLANA DE
ENERGIAS RENOVABLES-RVER
URBE-LUZ-URU-USB-UM-ULA-UCLA-ACLAMA- ANIH- AVEOL- CIV-AVIEM-CIDEZ
BOLETIN N° 25- PERÍODO 23 DE ABRIL AL 10 DE MAYO DE 2018
URBE-LUZ-URU-USB-UM-ULA-UCLA-ACLAMA- ANIH- AVEOL- CIV-AVIEM-CIDEZ
BOLETIN N° 25- PERÍODO 23 DE ABRIL AL 10 DE MAYO DE 2018
1.
INTRODUCCION
Esta segunda edición extraordinaria toma
en su tema central, el análisis del sistema energético nacional, no solo en los
aspectos del desarrollo y crecimiento físico de la infraestructura para el
suministro de la energía requerida para la Sociedad, la Economía y cumpliendo
las leyes y reglamentos de protección Ambiental,
sino en la recuperación del deterioro general actual, por un cambio que
habilite una mejor organización para la planificación, la operación, la
administración, el desarrollo tecnológico, para asegurar su permanencia en el
tiempo, la productividad, la competitividad y la viabilidad futura, ante los
retos de la seguridad energética, la calidad de vida de la población y la
mitigación del cambio climático. Luego de haber analizado en el anterior
Boletín el caso de la concepción, las iniciativas y la situación actual de la
electrificación con fuentes de energías renovables, en esta oportunidad será la
energía en su forma global y dejar así las bases para el ejercicio de la
prospectiva a un horizonte de 20 años.
De las noticias recibidas en la Red
en el período, relacionadas con ERN, es
importante señalar que aunque en el País no funcionan aún ninguno de los
parques eólicos proyectados en las regiones costeras del Occidente, hay un trabajo
sobre la metodología para determinar la máxima cobertura en los sistemas de potencia
y la selección de los equipos de generación que se adecúen a las velocidades de
viento existentes según la estación climática, tomando en consideración la
diferente tecnología de los aerogeneradores, respecto de los equipos de
generación convencionales. En relación a los costos de operación de las ERN,
siguen llegando noticias sobre la notable reducción de costos para los hogares
en regiones en donde los niveles de irradiación solar y de velocidades de
viento son altas, a diferencia de las regiones en donde las condiciones
climáticas no son tan favorables. En otras naciones con trayectoria de uso de
ERN, la Sociedad Civil está haciendo
propuestas para afrontar los retos globales ante la transición energética sostenible
en marcha, como actuaciones energéticas en el urbanismo, las edificaciones, los
sistemas de transporte, el autoconsumo, la generación distribuida y para la
erradicación de la pobreza energética. Con relación a este último tema, la AIE
y la IRENA han lanzado el alerta sobre el 13 % de la población mundial sin
acceso a la electricidad y el 40 % que aún utiliza la biomasa tradicional
(leña) y el carbón para cocinar sus alimentos, lo cual está en el Objetivo N° 7
de los Objetivos del Desarrollo Sostenible 2015-2030.
2.
NOTICIAS
RECIBIDAS EN LA RED –PERIODO ACTUAL (J. Salas/ C. Aldana)
Durante
el período se han recibido y/u obtenido las noticias e información siguientes:
· 06 de abril-2018, Revista
Energía e Industria, N° 3, AVIEM, Caracas, “Energía Eólica, un reto
operativo”, Ing. Marcos Ortíz. Desarrollo de una aproximación
metodológica para la determinación del porcentaje máximo de penetración de
energía eólica en sistemas eléctricos de potencia. Al nivel mundial se han
llevado a cabo diversos estudios relacionados con la generación eólica y su repercusión
en los sistemas de potencia, sin embargo, a pesar de que Venezuela cuenta con
un alto potencial de aprovechamiento de la energía proveniente del viento,
hasta ahora son incipientes los esfuerzos en estudios de implantación de ese
tipo de generación en el país.
Buena
parte del ímpetu con que se extiende la energía eólica a nivel mundial, se
explica por la urgente necesidad de combatir el cambio climático global. Sin
embargo, la integración de grandes bloques de generación que utilizan como fuente
primaria de energía el recurso viento, tiene asociado un reto operativo
relacionado con la variabilidad de dicha fuente, es por ello que una constante
interrogante técnica que actúa como limitante en la definición de las políticas
de implementación de este tipo de generación está asociada al porcentaje
máximo de contribución que pueden aportar en los sistemas de potencia en
cumplimiento de los criterios de calidad de servicio establecidos.
Contexto
Local de la integración de Energía Eólica:
Actualmente, se ha considerado en los planes de expansión de generación de
Venezuela la instalación de generación eólica en el contexto de otras
alternativas. Es importante destacar, que los techos de potencia instalable
pueden distar mucho de los techos de potencia eólica aprovechable por el
sistema eléctrico, dado que la aleatoriedad del recurso del viento y la
tecnología de los aerogeneradores sustancialmente diferente de las plantas
convencionales, introduce desafíos técnicos en la operación del sistema de generación
y transporte.
La
integración de grandes bloques de generación eólica en los sistemas eléctricos
de potencia, plantea algunos retos de operación derivados principalmente por la
tecnología de los aerogeneradores la cual es sustancialmente diferente de las
plantas convencionales.
A
través de simulaciones realizadas en un caso práctico de la Isla de Margarita,
se pudo demostrar que características como la demanda, inciden de forma directa
en el comportamiento de un sistema de potencia ante la presencia de una
perturbación en condiciones de alta incidencia eólica. La diferencia que se
presenta en la respuesta ante demanda alta y baja, se debe principalmente a que
resulta más desfavorable para el sistema una condición de valle de demanda
puesto que existen menos unidades de generación convencional sincronizadas lo
cual se traduce en una disminución de la inercia que aportan esas unidades.
Los
emplazamientos de capacidades considerables deben ser conectados
preferiblemente a sistemas de transmisión de alta tensión y lo más cercanos a
los centros de carga (cuando las condiciones ambientales así lo permiten) con
el propósito de incrementar la capacidad de soporte de reactivos provenientes
de la red.
· 26 de abril-2018, NOTICIAS ACIEM, Bogotá, “Las fuentes de
energías renovables reducen 70% el costo de la electricidad en los hogares”. Las plantas de energía
fotovoltaica están empezando a formar parte del mercado energético del país y
con ellas nuevas propuestas de consumo ambientalmente responsables.
“La tasa de ganancia obtenida a partir de la
implementación de paneles fotovoltaicos en regiones donde las condiciones
climáticas no sean las adecuadas, puede ser muy baja, por lo que no podría
competir con aquella generada por combustibles fósiles. Adicionalmente, los
fenómenos climáticos como El Niño o La Niña, así como temporadas de lluvia
prolongadas, como en la que nos encontramos, puede hacer inviable la
instalación de paneles fotovoltaicos, ya que la cantidad de luz que llega es
insuficiente”, dijo David Caicedo, economista y politólogo de la Pontificia U.
Javeriana.
Aún
con estos factores de riesgo en el funcionamiento, ya contamos con la
experiencia de empresas como ReFeel que desde hace dos años tiene presencia en
el país; ellos argumentan que el retorno de la inversión que se hace en dichos
sistemas se da entre los siguientes tres o cuatro años, disminuyendo más de 70% en el
costo de la electricidad que pagaban sus clientes. A esto se suma, la
puesta en funcionamiento del Decreto del Ministerio de Minas y Energía, que
“reglamenta lo relacionado con los lineamientos de política pública para la
contratación a largo plazo de proyectos de generación de energía eléctrica”.
· 29 de abril de 2018, FUNDACION
RENOVABLES, Madrid, “Hacia
una Transición Energética Sostenible. Propuestas para afrontar los retos
globales”. La Fundación Renovables presenta un paquete global
de medidas urgentes e ineludibles para llevar a cabo la Transición Energética.
La propuesta apuesta por actuar prioritariamente sobre la demanda como vía para
mejorar la gestionabilidad del sistema eléctrico. La política fiscal se
convierte en herramienta fundamental y, entre otras medidas, incorpora en el
IBI las ineficiencias energéticas de los edificios.
Los temas de las propuestas de la transición
energética sostenible son:
1. Actuaciones
urbanas
2. Erradicación
de la pobreza energética
3. Actuación
energética en edificios
4. Movilidad
y transporte sostenible
5. Autoconsumo
y Generación Distribuida
6. Plan
de Energías Renovables
7. Plan
de Cierre del Carbón, Nucleares y Gestión de Residuos
8. Reforma
Global urgente del Sistema Eléctrico
9. Fiscalidad
10. Participación
Ciudadana
· 03 de mayo de 2018, NOTICIAS ACIEM, Bogotá,
“El 13% de la población mundial aún no tiene acceso a la electricidad”. Mil millones de personas no tienen
acceso a la electricidad, lo que supone el 13% de la población mundial. Tres
mil millones, el 40% de los habitantes del planeta, siguen cocinando con
combustibles contaminantes (carbón o madera). Tan solo el 17,5% de toda la energía que se consume en el mundo es de
origen renovable.
Son
algunas de las conclusiones del estudio elaborado por la Agencia Internacional
de la Energía (AIE), la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA),
la División de Estadística de las Naciones Unidas (UNSD), el Banco Mundial y la
Organización Mundial de la Salud (OMS).
Pese
a ese apabullante dato, el informe resalta que se ha detectado una aceleración
desde 2010 en el acceso a la electricidad. En 1990, por ejemplo, el 30% de la
población mundial no tenía acceso. Aunque si se sigue al ritmo actual, “674
millones de personas seguirán viviendo sin electricidad en 2030”, frente a los
mil millones de ahora.
Aunque
en el estudio se detectan avances en algunas regiones, las cinco organizaciones
internacionales advierten: “de las cuatro metas relacionadas con la energía,
las cocinas limpias siguen siendo el objetivo más rezagado, debido a la poca
sensibilización de los consumidores, las deficiencias financieras, la lentitud
de los avances tecnológicos y la falta de infraestructura para la producción y
la distribución de combustible”. En 2030, si no se cambia la tendencia, 2.300
millones de personas seguirán usando esos métodos tradicionales.
3.
LOGROS,
LECCIONES APRENDIDAS Y OPORTUNIDADES DE MEJORA DEL
SISTEMA ENERGETICO
VENEZOLANO 1958-2018 (J.
Salas)
3.1.
INTRODUCCION
Este trabajo cubre la descripción,
análisis y propuestas respecto de los éxitos, los retos, las lecciones
aprendidas y las oportunidades de mejora del Sistema Energético Venezolano.
Este está constituido por el Sector de Hidrocarburos (Petróleo, Gas Natural y
Orimulsión), el del Carbón, el de la Electricidad (Hidroenergía, Energía
Eólica, Energía Fotovoltaica, entre otras) y el de las Energías Alternativas
(Nuclear, Bioenergías, Geotermia, Desechos Sólidos, etc.), siendo los
principales sectores energéticos descritos, originados como industria para la
exportación y el mercado interno.
Venezuela posee desde inicios del
siglo XIX minas de materias fósiles y metales y al final del siglo se implantó
por la iniciativa privada el uso de la electricidad en las ciudades más
importantes y con acceso a los puertos. La entrada del siglo XX permitió al
País entrar en el grupo de países productores de hidrocarburos y continuar como
país minero y decayendo en las actividades productivas agropecuarias que
soportaban la economía nacional.
En relación al tipo de utilización
final, las ventajas del uso de la energía en forma de electricidad son
ampliamente conocidas y algunos aspectos como su grado de disponibilidad, fácil
control, bajos requerimientos de inversión para el usuario final, etc., son
difíciles de evaluar cuantitativamente y constituyen una de las razones de
preferencia que podría en determinadas circunstancias, redundar en una
inadecuada utilización de recursos a nivel nacional, debido al gran volumen de
energía eléctrica que puede estar en consideración Lo anteriormente expuesto
permite mostrar la importancia que tiene el manejo coordinado del sector
energético y el invaluable papel de la energía eléctrica para lograr la
optimización del uso de los recursos que un país dispone [1].
Además de los aspectos
técnico-económico-ambientales de la Energía del lado de la Oferta arriba
citados, es importante cubrir los aspectos de la Demanda de Energía nacional según
el sector, incluyendo las industrias de la energía, básicas, de manufactura, la
agricultura, los servicios, el comercio, el residencial y el Transporte, su
consumo global y el específico, los cambios tecnológicos en los equipos que
reducen los requerimientos energéticos específicos y los costos, y políticas de
tarifas de la energía, de eficiencia y conservación de la energía, los cuales
han sido tratados superficialmente en los documentos de política energética
consultados [3].
En el caso venezolano, desde 1960 se
inició el proceso de los Planes de Desarrollo Quinquenales de la Nación
normativos, que daban la orientación a corto plazo de los objetivos sociales,
económicos y políticos sobre los que se fundaron las inversiones del gobierno
de turno en las áreas de infraestructura general y energética.
En el mediano y largo plazo se debe
hacer una revisión del plan prospectivo 2015- 2040, efectuar una evaluación
técnico-económica-ambiental de las opciones de Energías Renovables Nuevas y de
Energías Alternativas no convencionales, según los requerimientos de
planificación general de la Nación, lo cual no está cubierto en este documento.
3.2.
ANTECEDENTES DEL SISTEMA ENERGETICO
VENEZOLANO
El Sistema Energético Venezolano
(SEV) se organiza desde la constitución del Ministerio de Energía y Minas (MEM),
como sustituto de Ministerio de Energía y Minas (MMH), luego de la
nacionalización de la Industria Eléctrica (1975) bajo el Ministerio de Fomento
y el Fondo de Inversiones de Venezuela y la de los Hidrocarburos (Petróleo y
Gas) y constitución de PDVSA como empresa matriz (1976), quedando a cargo del
MEM la elaboración del primer Plan Energético Nacional y las relaciones con el
Consejo Nacional de Energía, creado en 1959, previo al 1er Congreso Venezolano
de Energía, efectuado en Caracas, por el Colegio de Ingenieros de Venezuela, en
1978 [2].
Toda la anterior estructura del
anterior MMH tenía la misión del control y fiscalización del Negocio
Petrolero con las empresas concesionarias que desde inicios del siglo XX explotaban
los hidrocarburos en sus procesos industriales de exploración, producción,
refinación, mercadeo y transporte y el Ministerio de Fomento (MF), encargado
del control de las empresas privadas de suministro eléctrico y de la promoción
de las pequeñas empresas eléctricas (Industria eléctrica), además de creador
entre 1958 y 1960 de las empresas públicas CADAFE y CVG-EDELCA.
Es importante considerar que desde que
se organiza el SEV existen dentro del Sector de Hidrocarburos dos figuras
relacionadas: la Industria Petrolera
y el Sector Petrolero Nacional, bajo
la coordinación y control de Petróleos de Venezuela (PDVSA) y el MEM.
· La
Industria o Negocio Petrolero
tiene la misión de asegurar la calidad al menor costo y mayor rentabilidad, de
los procesos de exploración, de operaciones de producción, de manufactura y
mercadeo, de Tecnología, de Servicios, de Seguridad, Higiene y Protección
Ambiental, del Petróleo, Derivados del Petróleo, Gas Natural, Bitúmenes y de la
Petroquímica, con productos que cumplen normas y estándares nacionales e
internacionales, en los volúmenes requeridos, y es la fuente generadora de
divisas a la Nación.
· El
Sector Petrolero Nacional
(SP) tiene la misión de proveer a través de la División de Mercadeo Interno y
otros entes de PDVSA, productos como los combustibles líquidos, el gas natural,
los lubricantes, los fertilizantes, y otros productos energéticos y no
energéticos que sean requeridos por los sectores de Transporte, Eléctrico,
Industrial, Agrícola, Residencial y Comercial de la nación, a través de las
redes de distribución y despacho, bajo control del MEM, a los precios
establecidos al nivel nacional, formando el
SEV, junto con el Sector Eléctrico Nacional.
· Desde
la constitución del Sistema Energético Venezolano y el funcionamiento del MEM
como órgano central de coordinación del Negocio Petrolero (PDVSA) y del SEV
(PDVSA-Gas/Deltaven/DR, SEN), se nota una separación y lenta integración entre
el SP y el SEN por las diferencias en cultura y de enfoque en la atención del
cliente, así como una gran diferencia en dimensión entre el Ministerio de
Energía y Minas (poca cantidad de personal y menor desarrollo) y el de la
empresa matriz PDVSA (mayor cantidad de personal de amplia experiencia y
formación).
3.3.
DESARROLLO DE LA INDUSTRIA PETROLERA
NACIONAL
La industria petrolera nacional (IPN)
se inicia en el momento de la aplicación del ejecútese de la nacionalización,
en enero de 1976. Más adelante se
incorpora la industria petroquímica nacional a las demás empresas nacionalizadas (IPPN). En
ese momento había alrededor de sesenta (60) años de experiencia venezolana en
exploración y explotación petrolera y una infraestructura importante al nivel
nacional. No hubo ninguna interrupción, sino una continuidad operacional de los
procesos, con nueva gerencia nacional.
Lo que existió desde la segunda mitad
del período 1910-1920 hasta 1975, fue la industria petrolera concesionaria,
período en el cual todas las actividades de producción y de servicio las
realizaban las empresas extranjeras en las áreas de producción que tenían
asignadas y no había una coordinación central. En este período inicial se construyó
la mayoría de las instalaciones de los procesos de extracción de crudo, de
recolección y bombeo de crudo, de almacenamiento, tratamiento y transporte de
crudo, de compresión de gas y de refinación de combustibles líquidos, en varias
regiones del país, lo cual era suficiente para la exportación y para la
generación eléctrica propia de instalaciones petroleras y comunidades vecinas [4].
En ese período se logró la aprobación
de la Ley de Hidrocarburos, en 1943, en la cual se logran mejoras a las
condiciones de venta del petróleo, logrando mayores ingresos para la ejecución
de obras y la industria petrolera construyó al final de los años 1940 los
centros de refinación de petróleo en el Occidente que ampliaron la oferta de
suministros al mercado internacional como al mercado nacional.
En los años 1960 hubo un cambio de
política del Negocio Petrolero para preservar las reservas de petróleo y
valorizar el gas natural asociado a los yacimientos, como la de no otorgar
nuevas concesiones petroleras, sino contratos de servicio; participación
directa del Estado en la actividad petrolera, a través de la Corporación
Venezolana del Petróleo (CVP); impulso adicional a la política de fiscalización
y conservación; especial atención a la valorización y utilización del gas; y
participación óptima o máxima en los beneficios de la industria [4]. Se
crea la OPEP, junto con la Arabia Saudí y otros países de Medio Oriente, de
África y de Asia, con lo cual se inicia el período del predominio del petróleo
y el gas natural sobre el resto de energéticos al nivel internacional.
La década de 1970 fue de suma
relevancia tanto para el Sector Petrolero y Gasífero como para el Negocio
Petrolero y el Sector Eléctrico, primeramente, con los registros de producción
más altos del Negocio Petrolero, los mayores ingresos monetarios por barril
debido al embargo petrolero por el conflicto árabe-israelí del año 1973 (boom
o shock petrolero), lo cual fue un ingreso adicional inesperado en los
países miembros de la OPEP.
Al final de la década de 1970, ya
establecida la IPPN, se volvió a registrar un incremento en los precios del
petróleo en el mercado internacional, debido a la revolución islámica en Irán,
miembro de la OPEP, sin que ese nuevo incremento afectara los precios del
mercado interno de los hidrocarburos. Al mismo tiempo, se inició el cambio del
patrón de refinación en la nueva refinería de El Palito y luego en la ampliación
de la refinería de Amuay, para procesar crudos pesados y continuar atendiendo
el Negocio Petrolero y el creciente Mercado Interno.
La década de 1980 se caracterizó por
una variación de la demanda en el Negocio Petrolero, se adecuaron las refinerías
mayores para recibir crudos medianos y pesados y se comenzó a discutir en el
mercado interno los precios de la gasolina al detal y a manejar las protestas
generales por el aumento de las tarifas eléctricas tomando en consideración los
costos de los combustibles y la inflación ocasionada por la devaluación del
Bolívar [3].
La década de 1990 trajo novedades en
el manejo de la energía en el entorno internacional, al haber nuevos actores en
el Negocio Petrolero, nuevos conflictos en el Medio Oriente, mercados
emergentes asiáticos y latinoamericanos, nuevos bloques comerciales como el
BRIC, el ALCA, la Unión Europea. La Conferencia sobre Desarrollo Sostenible y
Efecto Invernadero de Río en 1992, propone la reducción de las emisiones de CO2
en el ambiente, la tendencia del cambio de la generación termoeléctrica con el
ciclo combinado electricidad-vapor de mayor eficiencia, facilitó la
desregulación del servicio eléctrico en países de Norteamérica, Reino Unido y
en Europa, separando la generación y la distribución y una declinación aparente
de las fuentes a base del carbón y la nuclear y el impulso de las energías
renovables.
En la década de 1990, en el ámbito
nacional se tomaron las acciones de reestructuración del Negocio Petrolero
siguientes:
· Inicio
del Programa de Apertura Petrolera desde el principio de la década, el cual fue
producto de una reforma para reactivar la producción petrolera de los
yacimientos maduros mediante convenios operativos con empresas petroleras
privadas nacionales y extranjeras, para el período 1989-1999, con una visión
productivista, ante un próximo agotamiento de los yacimientos. Luego de cuatro
rondas de negocio para asignar las 21 áreas de producción hasta 1997, además de
cuatro asociaciones estratégicas para el desarrollo de la producción de la Faja
Petrolífera del Orinoco, iniciando el desarrollo de la totalidad de los
proyectos productivos y rentables de la IPN. Fue un cambio de paradigma en la
relación Petróleo- Sociedad, generando miles de empleos.
· Desarrollo de la
comercialización de la Orimulsión, como alternativa al Carbón en los países
importadores, a través de la alianza BP-BITOR, con un compromiso inicial de 9
MMTon del combustible en Europa.
· Anuncio del inicio del Proyecto Cristóbal Colón para el desarrollo
de nuevos bloques de producción de gas natural libre en la península de Paria,
bajo asociaciones estratégicas con Shell/ Exxon, con un cronograma desde 1993
hasta 2001.
Desde
1999 se inician cambios de política del Sistema Energético Venezolano y del
Negocio Petrolero, los cuales incluyen las acciones siguientes:
· Nueva Ley Orgánica de Hidrocarburos
(2001), la cual permite a empresas mixtas de capital privado nacional o
extranjero, participar en las actividades de exploración, producción y
comercialización de hidrocarburos en el territorio nacional incluyendo la
plataforma continental.
Se incorporan desde 1999 al 2001 las empresas Cerro Negro (Exxon
Mobil/ BP), Sincor (Total/ Statoil) y Ameriven (Chevron/
Conoco-Philips) a las Asociaciones Estratégicas de la Faja Petrolífera del
Orinoco (FPO), junto con Petrozuata, para la producción de crudos
sintéticos de grado menor a 10° API, con participación minoritaria de PDVSA.
· En ese período se decidió cancelar la producción de Orimulsión
®, a pesar de haber compromisos de suministro con China. India y otros
países en Europa, como alternativa al carbón. En 2004 la producción de las
asociaciones estratégicas fue de 563 MBD, es decir, el 17,9 % del total de
crudo.
· Ley Orgánica de Hidrocarburos Gaseosos (1999), la cual faculta al ENAGAS
(Ente Nacional del Gas), para asesorar en la regulación de las
actividades de transporte y distribución de gas y permitir la ejecución de
actividades directamente por empresas nacionales y extranjeras.
· La producción de gas natural del período 1999-2004 se reduce a un
valor entre 2,4 y 2,8 MMPCD, de los cuales se consume el 70 % en la producción
petrolera. Con relación a la década anterior, ese rango es de un valor menor y
una política de reducir el consumo de gas natural.
· De los principales proyectos gasíferos, los más importantes son el
Mariscal Sucre (antes Cristóbal Colón), con producción de 1.050 MMPCD, en el
mar Caribe, sin fecha de ejecución, al Norte de la Península de Paria.
La crisis actual del Sector de Hidrocarburos y de su empresa PDVSA,
abre un círculo vicioso iniciado en 2004, con los aspectos siguientes [9]:
1.
Predominio: Política no
petrolera en su misión y visión
2.
Disminución de recursos
para sus áreas medulares
3.
Incumplimiento de Planes
de producción
4.
Ausencia de mantenimiento
en sus instalaciones
5. Negocios no medulares
como primera prioridad (Alimentos,
Política)
6.
Endeudamiento excesivo
3.4.
EVOLUCION DEL SISTEMA Y DEL SERVICIO
ELECTRICO NACIONAL
Al final de la década de 1950, en
1958, se crea la primera empresa del Estado, CADAFE, Compañía
Anónima de Administración y Fomento Eléctrico, que absorbe las empresas
locales de generación eléctrica a lo largo del país y se dedicará además a la
generación, el transporte, la distribución y la comercialización del servicio
eléctrico en el resto del país [5].
En la década de 1960 hay una expansión
del Sector Eléctrico Privado y Público nacional en los primeros años de la
década, ante la creciente demanda de energía y por el predominio de la
generación termoeléctrica a base de combustibles líquidos y gas natural. Sin
embargo, el Estado tiene el plan de desarrollar el inmenso potencial de
hidroelectricidad del río Caroní, creando en 1960 la empresa CVG-EDELCA,
Electrificación del Caroní, filial de la CVG, dos años antes de que es
puesta en operación la Central Hidroeléctrica de Macagua I, asociada a la zona
industrial siderúrgica de Matanzas (SIDOR). En 1963 se inician las Obras
Civiles y Electromecánicas de la represa
de Guri, al sur-occidente de Ciudad Bolívar y Puerto Ordaz. El resto de la
década vio el desarrollo rápido de la electrificación del país en ciudades,
pueblos y caseríos del Interior de la nación por CADAFE, llegando a ser
la más alta penetración eléctrica en la América Latina y en 1968 se crea la OPSIS, para
iniciar en 1968 la interconexión
eléctrica nacional con redes en 230 kV entre el Centro y Guayana, entre otras
funciones.
Desde 1970 se constituye un organismo
llamado CAVEINEL, Cámara Venezolana de la Industria Eléctrica,
cuyo objetivo principal es coordinar las acciones técnicas, administrativas y
operacionales para lograr la interconexión eléctrica nacional y la programación
de los sistemas de generación, transmisión y distribución eléctrica y llevar
las estadísticas conjuntas del sector eléctrico.
Los planes de expansión del Sector
Eléctrico Nacional en generación, transmisión y distribución continuaron
ejecutándose según el programa de inversiones, en 1977 se pone en servicio por CVG-EDELCA
la Sala de Máquinas I del Centro de Generación de Guri, con una capacidad
instalada de 2.785 MW, luego la
expansión termoeléctrica en Tacoa a 720
MW por ELECAR y de Planta Centro en 800 MW por CADAFE, iniciando la operación del sistema
troncal de transmisión en 400/230 kV Guayana-Capital desde la Central de Guri
hasta la Planta Tacoa, para reforzar la alta demanda de electricidad en Caracas
y alrededores, quedando pendiente la expansión a la región Central hasta Planta
Centro, además de la zona industrial de Guayana.
En los años 1980 el Sector Eléctrico Nacional
continúa la expansión de Centros de Generación termoeléctrica en Ramón Laguna
en 510 MW por ENELVEN, se
cancela el proyecto de planta termoeléctrica a carbón del Zulia, se concluye la
construcción de las expansiones de Planta Tacoa por ELECAR y Planta
Centro en 1.200 MW por CADAFE,
extendiendo la línea troncal de transmisión de 400 kV al Centro-Occidente y la
de 230 kV a la Costa Occidental del Lago de Maracaibo. En 1987 se pone en
operación por CVG-EDELCA de la Sala de Máquinas II del Centro de
Generación de Guri, con una capacidad instalada de 7.125 MW, para alcanzar los 10.000
MW previstos de la Central de Generación de Guri “Raúl Leoni” (hoy Simón
Bolívar) y la puesta en operación de las líneas de 765 kV entre Guri y la SE La
Arenosa, quedando conformado a 1988 el Sistema Interconectado Nacional (SIN).
En la década de 1990 hubo cambios de política y noticias como los
siguientes:
1.Restricción de instalación de nuevas
unidades de generación termoeléctrica a gas en plantas eléctricas, por razón de
la alta capacidad de generación hidroeléctrica y termoeléctrica instalada en
los años 1970-1980 en el país. Esa reglamentación permitía el gasto para el
mantenimiento extraordinario requerido de unidades de generación
termoeléctrica, indisponibles por falla o que llevan más de 20 años en operación,
sin embargo, no se efectuaron por falta de recursos financieros y se
proyectaron para la siguiente gestión del Sector, con una inversión global en
generación de 1,7 MMMUS$, de un total de 5,7 MMMUS$ incluyendo los subsistemas
de transmisión y distribución eléctrica, que espera desembolsar el SEN (Público
+ Privado) entre 1997 y 2001, debido al déficit presupuestario de las empresas
de suministro [6].
2. El Ministerio de Energía y Minas (MEM) preparó en 1997 un
documento de política energética para el Gobierno Nacional, previamente
sometido ante el Consejo Nacional de Energía, en el cual se anuncia la
eliminación de los subsidios en los precios de combustibles, sosteniendo el
documento en los aspectos sociales, el cuestionamiento de la visión “rentista”
generalizada del papel que el petróleo debe cumplir en la Economía en la
sociedad venezolana, siendo una dificultad política para la sinceración de
precios y tarifas y permitan al mercado interno de combustibles y electricidad
la entrega de volúmenes y calidad y reduzcan el alto nivel de endeudamiento de
las empresas eléctricas públicas [7].
3. Interconexión Eléctrica con Brasil en 230 kV va a ser inaugurada
en 1998, una vez puesta en operación la Central Hidroeléctrica de Macagua II,
la subestación Santa Elena de Uairén y la línea de transmisión hasta Boa Vista.
4. En resumen, el sistema eléctrico nacional posee en las últimas
décadas del siglo XX una infraestructura de primer mundo, sin embargo, la
gestión administrativa ni la operacional no aseguran la prestación de un buen
servicio al cliente, sin marco legal regulatorio ni ley que asegure la
viabilidad del servicio ni castigue el hurto de electricidad, ni tarifas
adecuadas que aseguren la rentabilidad económica del suplidor, la economía y
satisfacción de los clientes y promuevan el uso racional y eficiente la energía
eléctrica entre los usuarios del servicio.
Después de 1999 se aprueba la Ley Orgánica del Servicio Eléctrico
(2001), la cual define el modelo de gestión, la planificación, las personas que
intervienen, las actividades del SEN, para la prestación del servicio, las
tarifas de las actividades y de las infracciones y sanciones que impiden un
servicio eficiente.
El Ministerio de Energía y Petróleo (MENPET) es el órgano rector
del Sistema Energético Venezolano (SEV), encargado de la regulación, la
formulación y el seguimiento de políticas y la planificación, realización y
fiscalización de actividades en materia de energía en general.
La FUNDELEC es el organismo asesor del MENPET en materia eléctrica,
así mismo, es el ente encargado de regular la prestación y uso del servicio
eléctrico.
El
Ministerio de Energía y Petróleo no ha ejecutado a tiempo las acciones
contempladas desde el inicio de su gestión 1999-2006 para restablecer la
capacidad de generación termoeléctrica, en especial, luego de la crisis
hidrológica de 2001-2002, en recuperación de unidades existentes e instalación
de nuevas unidades, lo cual se ha planteado así mismo por la CAVEINEL [8].
Como un cambio positivo en el parque termoeléctrico es la
incorporación de la tecnología del ciclo combinado gas-vapor de alta
eficiencia, en las unidades en operación desde 2003 en Planta Termozulia, de
ENELVEN.
La actual crisis del Sub-Sector Eléctrico y de su empresa
CORPOELEC abre un círculo vicioso, iniciado en julio de 2007, fecha de su
creación, según [9]:
1. Predominio: Política
no corporativa, sino partidista
2. Sobre explotación en
el Sistema Hidroeléctrico del Caroní (Guri)
3. Fuerte subsidio en su
administración y operaciones (tarifas
subsidiadas)
subsidiadas)
4. Incumplimiento de
planes
5. Ausencia de
mantenimiento en todos los sistemas, no existe gerencia
3.5. LECCIONES APRENDIDAS DE LAS POLITICAS
Y LA PLANIFICACION DEL S.E.V.
Una característica desde que se creó
el S.E.V. es que el marco jurídico, de políticas generales y la planificación
no han ido a la par de los aspectos operacionales, y administrativos, de hecho, al final de la década de 1980, en
la cual la Industria Petrolera y Petroquímica Nacional llevaba más de 10 años
desde su nacionalización y estaba terminado y en operación el Sistema
Interconectado Nacional en Alta y Extra Alta Tensión, no existía un documento
aprobado de Política Energética Nacional, ni de la Política de Precios de la
Energía, ni del Sistema de Planificación Integral del S.E.V., ni la Ley
Orgánica del Servicio Eléctrico. Se hará seguidamente un resumen de Lecciones
Aprendidas en varios documentos de Política y Planes emitidos desde 1979 [3].
· Documento Rector de la Política Energética Venezolana [10]: Es
el primer intento del Estado Venezolano como un adelanto de lo que sería el
Plan Energético Nacional, editado
en 1979, en plena etapa
de ejecución del V Plan de la Nación (1976-1980) por el MEM. Se inicia en él, el tratamiento del Sistema
Energético Nacional de una manera integral y coherente. Incluye el marco
institucional del S.E.V., balances energéticos del lapso 1970-1977 y un
análisis prospectivo del S.E.V. 1978-2000 y los mecanismos de planificación y
control.
1. Marco Institucional del
S.E.V.:
Además de los Sub-sectores de Hidrocarburos, del Carbón y de Electricidad, se
incluye el Nuclear, por la recién creación del CONADIN, como órgano consultivo
del Poder Ejecutivo y bajo la secretaría ejecutiva de la CADAFE. El Sub-sector
de Otras Energías corresponde a las Energias Renovables (Eólica, Fotovoltaica,
Biomasa, Geotérmica).
2. Demanda de Energía lapso
1970-1977:
El consumo de energía general del lapso tuvo un crecimiento interanual del 6,7 %, con un consumo de energía per
cápita de 15,8 BEP, superior al promedio mundial de 10 BEP para 1977.
2.1. Petróleo: El mercado interno de derivados del petróleo, excluyendo entrega
a naves, pasó de 148 MBD en 1970, a 246 MBD en 1977. La demanda de gasolina se
ha duplicado, con una tasa de crecimiento del 9,3 % interanual, siendo un punto importante la baja eficiencia del
parque automotor que no recibió atención.
2.2. Gas Natural: La demanda de gas
natural, aumentó durante el período 1970-1977 a una tasa de 6,2 % interanual, pasando de 955 MMPCD
en 1970 a 1.435 MMPCD en 1977, de los cuales el 44 % fue consumido por la IPPN
y el 43 % sirvió para abastecer los sectores industrial, residencial y
comercial.
2.3. Electricidad: La demanda eléctrica ha
venido creciendo en los últimos 20 años a tasas bastante elevadas, producto del
intenso proceso de urbanización e industrialización del país. En el lapso
1970-1977 el consumo nacional de electricidad pasó de 11.004 GWh a 18.800 GWh,
lo cual equivale a una tasa de crecimiento promedio de 8,2 % interanual.
3. Análisis Prospectivo
lapso 1978-2000: Es de destacar que en
los documentos del MEM se comienza por los Recursos, luego la Oferta de Fuentes
Energéticas y por último la confrontación Oferta-Demanda Energética, cuando
debería ser al contrario: de la Demanda de Energía a la confrontación
Oferta-Demanda.
3.1. Petróleo: La demanda futura del
mercado interno de derivados del petróleo (excluyendo entrega a naves) para el
período 1978-2000, suponiendo una tasa promedio de crecimiento del 8 %
interanual hasta 1985 y luego del 5
% interanual hasta el 2000, pasará a 972 MBD, cantidad equivalente al 44 %
de la producción petrolera del país en 1978. ¿En qué se basaban las
suposiciones si no hubo ninguna campaña de mejora en Transporte? No se ofrece
ninguna solución a la inmensa pérdida económica por el subsidio a los combustibles.
3.2. Gas Natural: La demanda total de gas
natural pasará de 333 MBEPD en 1978 a 685 MBEPD en 2000. En cuanto al gas para
generación termoeléctrica, se prevé una reducción
al 8,3 % para 1990 y del 7, 5 % para 2000. ¿Una limitación
futura al Ciclo Combinado de turbogeneradores? La escasez de gas natural es una
previsión a corto y mediano plazo, aunque se reduzca el consumo por la IPPN.
3.3. Electricidad: La demanda máxima se
sitúa en 1980 en 6.325 MW, para 1990 en 14.685 MW y finalmente para el
año 2000 en 27.134 MW, siendo una estimación optimista. Evidentemente las proyecciones de demanda
máxima fueron demasiado optimistas, pues desde la década de 1980 hubo un
período de recesión económica que se prolongó a los 1990 por reducción de las
exportaciones petroleras y minera y las demandas máximas reales fueron 7.960 MW
y 11.940 MW, respectivamente. A
partir de 1990 ocurre una disminución acelerada de la capacidad de reserva
del sistema, estimándose para 1990 llegue al 33 % y para 1997, al 19 %.
Es de señalar que, en general, al nivel internacional, se considera que la
capacidad de reserva óptima se sitúa entre 40 % y 45 % del total instalado.
3.4. Oferta-Demanda Global: En esta
confrontación global nos encontramos con excedentes energéticos hasta 1990,
cuando comienzan a ser insuficientes para aparecer un déficit antes del fin del
siglo XX (2000). Estos resultados llaman a la reflexión en cuanto a las
acciones que habrá que hacer desde ahora para evitar que ello ocurra.
4. Mecanismos de Planificación y control- Estrategias: Es el
conjunto de acciones o
líneas de acción que dan especificidad a las políticas a fin de alcanzar los
objetivos propuestos.
4.1. Desarrollar
un programa exhaustivo de prospección e investigación para determinar el
inventario de nuestros recursos energéticos y la oportunidad de su desarrollo.
4.2. Diversificar
los mercados internacionales de crudo y derivados tomando en cuenta: a) La
rentabilidad y seguridad de los nuevos mercados y la conveniencia de conservar
los tradicionales. b) El incremento de las ventas a consumidores finales,
directamente a través de agencias existentes. c) El aumento progresivo de las
ventas de crudos pesados en forma favorable para lograr sustituir volúmenes
equivalentes de crudos livianos o medianos.
4.3. Incrementar el potencial de investigación y desarrollo tecnológico
del sector energético a través de creación de centros especializados de
investigación y desarrollo tecnológico para las fuentes energéticas.
4.4. Promover la venezolanización progresiva de los servicios
requeridos por la industria energética y la producción de sus insumos dentro
del país.
4.5. Racionalizar el consumo
interno de energía y sustituir progresivamente por otras fuentes, los
hidrocarburos que actualmente se emplean para la generación de energía, de
acuerdo a los criterios de costo social y costo de oportunidad, disponibilidad,
agotabilidad y renovabilidad, protección del ambiente y eficiencia, ahorro y
conservación de la energía.
4.6. Racionalizar los sistemas de distribución nacional de la energía y
mejorar la calidad del servicio en el mercado interno.
4.7. Perfeccionar la organización institucional del sector energético
de acuerdo con los cambios estructurales ocurridos en la administración pública
nacional.
4.8. Exigir de los grandes proyectos industriales estudios técnico-económicos
que incorporen la medida del valor agregado nacional obtenido mediante la
exportación de sus productos en relación al que se lograría mediante la
exportación de las fuentes energéticas utilizadas.
· Documento base para la Política Energética Integral de Venezuela [11]: Este documento elaborado en Agosto de
1983 por el Ministerio de Energía y Minas (MEM), se propone como el esfuerzo
por establecer una política amplia, realista y de un definido carácter nacional,
alineado con el VII Plan de la Nación (1984-1989). El documento contiene: la Política
Energética de Venezuela, en cuanto a objetivos, factores críticos, lineamientos
de política y estrategias, los mecanismos de planificación y de control y el
Sistema Energético Venezolano con las proyecciones al final del siglo XX con
cifras actualizadas de los recursos energéticos disponibles.
Se
confirma el rol primordial del petróleo en el sector energético y de la
economía del país hasta fines de siglo y “muy probablemente después”. El Gas
Natural es el energético más usado por los consumidores finales de energía y
está llamado a jugar un papel muy importante. Las acciones futuras están
dirigidas a aumentar los recursos del gas libre. La Hidroelectricidad tiene un
potencial identificado a nivel nacional de 45.000 MW, sin incluir pequeñas
caídas de agua. El Carbón está llamado a tener una participación creciente en
el Sistema Energético Venezolano a mediano y largo plazo. En Otras Energías, la
Geotermia requiere la terminación de los estudios de pre-factibilidad y
factibilidad en las áreas de mayor potencial y en Bioenergía Solar y Eólica las
acciones están dirigidas a la evaluación más exhaustiva del potencial
aprovechable de estas fuentes. Las acciones en energía nuclear están dirigidas
fundamentalmente a la exploración y cuantificación de los recursos minerales
radioactivos.
Las
actividades más importantes en el uso racional de la energía están
dirigidas a promover acciones concretas en las empresas de mayor consumo
energético, tales como la del cemento, aluminio, petroquímica y siderúrgica, en
lo que respecta al sector industrial y a las empresas petroleras y
termoeléctricas en el sector energético; así mismo se promoverán campañas de
concientización para racionalizar el uso de la energía en residencias y el
transporte particular. Se avanzará y profundizará en el estudio ya iniciado
sobre un Sistema Nacional de Precios de la Energía en donde han
participado todas las instituciones involucradas en el problema.
1. Política Energética-
Factores Críticos: Además de los definidos en el Documento Rector de 1979, son los siguientes:
· Oferta de Energía: El potencial de producción proveniente de las “áreas
tradicionales” muestra una tendencia decreciente.
· La relación de reservas-producción anual de petróleos livianos está
cerca del límite de lo tecnológicamente recomendable (15 años) aunado al hecho
de que el incremento de las reservas obedece más a revisiones que a nuevos
descubrimientos.
· Consumo de Energía: La participación del gas natural asociado en la satisfacción del
consumo de energía será cada vez menor en el mediano y largo plazo,
requiriéndose volúmenes adicionales de gas natural libre, a fin de satisfacer
la demanda creciente de este energético.
· Dificultades técnicas, económicas y políticas restringen en el corto
plazo la sustitución de hidrocarburos por otras fuentes energéticas, lo cual
tiene incidencias en el largo plazo sobre las perspectivas de incorporación de
nuevas fuentes.
· Aspectos económicos: La fuga de hidrocarburos líquidos hacia el exterior es causada
fundamentalmente por el gran diferencial de precios de energía nacional frente
al internacional.
· Aspectos Tecnológicos: La ingeniería y la tecnología venezolana tienen una
participación relativamente baja en los Programas de Desarrollo del Sector Energético.
· La dispersión en la actual estructura institucional del Sector
Energético no favorece la toma de decisiones y la instrumentación de la
política energética.
2. Análisis Prospectivo del
Sector Energético en el lapso 1985-2000:
2.1. Demanda Futura de Energía:
Las
previsiones de demanda energética se conforman en las alternativas I (Bajo
consumo) y II (Alto consumo), las cuales se plantean como posibles límites
inferior y superior del consumo de energía a largo plazo, para los tres
sub-sectores dados a continuación.
· Transporte: Parque automotor, 4,6 % y 6,4 % de crecimiento interanual
para las alternativas I y II, respectivamente. Movimiento de pasajeros por
avión, 10 % y 15,4 % de crecimiento interanual, respectivamente.
· Industria: Producción bruta de la Siderúrgica, 7 % y 10,6 % de crecimiento interanual, para la industria del Aluminio, se estima
un crecimiento del 4 % interanual,
para la industria Petroquímica, entre el 5,8
% y el 8,5 % de crecimiento
interanual, en industrias varias, entre el 6,5 % y el 8,5 % de crecimiento
interanual.
· Residencial/
Servicios/ Otros: Se
tomó en cuenta la relación de consumo específico de energía por habitante.
2.2. Demanda
Interna futura por fuentes:
·
Derivados del Petróleo: Se estima que la demanda interna de
derivados evolucionaría a un ritmo comprendido entre 3,3 % (I) y 6,9 % (II) interanual. Las gasolinas y
los destilados representan más del 56 % del consumo total de derivados para
ambas alternativas hasta fines de siglo.
· Gas Natural:
Se prevé que la demanda futura del gas natural tendrá un crecimiento superior
al registrado históricamente, variando entre 9,5 % y 10,7 % interanual, según las alternativas de alto y bajo
consumo, respectivamente. El Sector Energético aumentará su consumo entre 8,6 %
y 9,5 % interanual, destacándose, para ambas alternativas, la industria
petrolera con el 60 % del total del gas demandado por el sector.
· Electricidad: La
demanda de electricidad como resultado del agregado de los distintos
sub-sectores de consumo final y del propio Sector Energético, se espera que
evolucione a un ritmo interanual comprendido entre 7,9 % y 8,7 % llegándose a quintuplicar al final. Esta proyección
luce exagerada en el tiempo que se realizó, tomando en consideración que desde
1981 la economía nacional tenía un crecimiento bien por debajo del que tuvo en
el período 1970-1977, que se le había asignado a la electricidad un crecimiento interanual del 9,3 % para el lapso 1978-2000 y solo se
veía un alto crecimiento del sector petrolero, es probable que la ejecución
del VII Plan de la Nación era imposible.
2.3. Confrontación
Oferta/ Demanda Global de Energía:
En
este análisis global, encontramos excedentes energéticos hasta 1995. A partir
de este año la demanda tiende a aproximarse a la oferta hasta superarla y se
genera un déficit para el final de período, de continuar las tendencias
actuales de consumo y no tomarse los correctivos necesarios. La sustitución de
fuentes es una vía para adecuar la oferta, pero requerirá una evaluación del
costo financiero y la exigencia tecnológica que ello conlleva. La reducción de
la demanda requiere medidas tomadas con suficiente anticipación que permitan
una repercusión a largo plazo. Coincide en este aspecto con el documento de
1979.
· Documento Necesidad de una Política Nacional de la Energía
para
Venezuela [12]: Este documento de trabajo presentado
por la Comisión de Energía y Minas del Senado de la República en
Agosto de 1992,
sobre el Sistema Energético Venezolano, se
destaca que los gobiernos existentes
a 1992, en los 74 años de explotación de este recurso, han mantenido en primer
plano la gestión sobre la parte del negocio de la industria del petróleo y por
el contrario, han olvidado la otra vertiente, la relativa al aprovechamiento
interno de la energía, huérfana hasta ahora del liderazgo que su importancia
requiere.
1. Aspectos Institucionales del Sector
Energético:
Quince
años han transcurrido de ese mandato legal, sin que el MEM haya podido
cumplirlo a cabalidad, ni haya podido estructurar internamente los recursos
humanos y materiales que puedan realizarlo. A todo esto se añade el peso que el
negocio petrolero tiene por su importancia económica para la Nación, por lo que
el aspecto Energía quedó en un segundo plano, muy menguado. La única
preocupación del ministro de turno, era y lo es hoy, el negocio petrolero y las
relaciones internacionales, especialmente con la OPEP.
Hoy, es una realidad que en el país no existen o al menos
no se han concretado en la práctica:
- Una política nacional de la energía.
- Un sistema de planificación integral del sistema energético nacional.
- Una política del Negocio Petrolero.
- Una política y un programa de conservación y de ahorro de energía
- Un Centro de Estudios e Investigación de la energía.
Además, en Venezuela la prestación del servicio de electricidad
tampoco cuenta con un marco legal apropiado, ni ha contado con un organismo
específico del Estado que ejerza una acción contralora o reguladora de la
industria. Es el único país en Latinoamérica y quizá en el mundo que no lo
posee.
Todas estas cuestiones que por ley son atribuciones y
responsabilidades del MEM, no se cumplieron en estos quince años de existencia.
Al organismo rector del Sector Energía debe dársele otra forma institucional y
organizativa, con mayores recursos y nivel político que estén acordes con las
necesidades reales del presente y del futuro.
2. Política y Planificación
Nacional de la Energía:
La
energía no resuelve las necesidades sociales en sí mismas, pero es el medio
fundamental para permitir su satisfacción, bien sea al nivel del consumo final
o como una parte del consumo intermedio en la producción de bienes y servicios.
Por lo tanto, la selección del sistema energético deberá ser coherente con los
objetivos globales del plan de desarrollo nacional y con las políticas globales
y sectoriales dirigidas a conseguir esos objetivos.
Una
de las dificultades de la planificación energética es la de que la mayoría de
las decisiones en el sistema energético tendrán su efecto pleno a largo plazo,
20 años, mientras que por regla general, los planificadores y los políticos
consideran el corto plazo, 5 años, o sea, un período de gobierno y son
reticentes en definir más allá de este período, las políticas globales.
En la
mayoría de países del mundo, la energía juega un doble papel. En primer lugar,
como insumo fundamental en todos los procesos productivos, es decir, como un
factor de producción y en segundo lugar, como un elemento indispensable de
bienestar, es decir, como bien de consumo. Para Venezuela, país productor y
exportador de energía, juega otros dos papeles de singular importancia. Por una
parte, la intensidad de capital envuelto en el permanente desarrollo de las
diferentes actividades de las industrias de la energía, en especial de la
petrolera, muy por encima de las necesidades internas de producción del país,
la convierte en elemento motor de la economía y por otra parte como exportador
neto de energía al resto del mundo, la convierte en la más importante fuente
generadora de divisas.
Estas
consideraciones nos tienen que llevar a concluir, que una estrategia energética
a largo plazo, apropiada, balanceada que no obedezca a intereses políticos ni
de partidos y sujeta a permanente revisión, es condición básica para lograr
transitar los caminos que conducen al país hacia su integral desarrollo.
3. Retos o Desafíos de la Energía para el diseño de una Estrategia
Energética:
1) Estatus Político para la Energía, igual
que en los países desarrollados. Aquí se planifica la continuidad, no la
innovación.
2) Un sistema Autónomo para la política
energética.
3)
Integralidad/ Globalidad. Completar todas las acciones estableciendo todas las líneas de
acción es el mayor reto y la tarea más importante.
4) Un Nivel Apropiado del precio de la Energía
5)
Una Estructura Apropiada, que posibilite una política energética y su planificación en el
mercado
6) Efectividad, cuando se tiene alta
probabilidad de alcanzar sus objetivos. El primero de estos objetivos es el de
suministrar la demanda de energía económicamente y conseguirlo, requiere de una
adecuada planificación de las inversiones lo cual envuelve la previsión de la
demanda y la optimización de la capacidad de suministro.
7) Seguridad, asociada con la calidad
del servicio, es decir, sin interrupciones ni fallas.
8) Preservación del Medio Ambiente, en las actividades relacionadas con el
suministro de energía (producción, transporte, transformación y distribución).
9) Eficiencia, o relación de las
pérdidas de energía por trabajo efectuado, no hemos hecho esfuerzos serios para
mejorar la eficiencia energética en la amplia gama del uso de la energía.
10) Adecuación de las fuentes
de
energía a cada uso, es el reemplazo de tipos de energía que actualmente se
utilizan, por otros que pudieran ser más adecuados bajo circunstancias
particulares.
11) Energización Selectiva, a través de la
abundancia de fuentes de energía.
12) Disponibilidad de recursos energéticos,
que es una cantidad variable en el tiempo, que requiere de una actividad
continua para determinarla.
13) Protección de los Recursos
renovables y no renovables, que pueden durar o no durar de acuerdo con nuestras
formas de utilización.
14) Sistema de Ciencia y
Tecnología,
en Venezuela es poco lo que se trabaja en tecnología energética.
15) Revolución Tecnológica, es un lugar común decir
que el mundo está en una constante revolución tecnológica, desde el trabajo de
oficina y de manufactura hasta la cultura y las comunicaciones.
16) Asegurar la Continuidad
Operacional del negocio petrolero en el largo plazo, al ir incorporando a los
mercados, las cuantiosas reservas de crudos pesados y extra-pesados con que
cuenta el país.
17) La Independencia
Financiera,
así como la autonomía política que requiere el Negocio Petrolero, es
fundamental para enfrentar el colosal desafío planteado.
18)
La Despartidización, o la no politización en la Industria, ha sido una característica
importante desde sus inicios.
4. Algunas Conclusiones:
1) Cualquier Política Energética Nacional debe tener muy en
cuenta
las diferencias entre el Negocio Petrolero (Industria) y la gestión en las
actividades energéticas en el país..
· 2) Al organismo rector del Sector Energía, debe dársele otra
forma
institucional y organizativa, con mejores y mayores
recursos humanos y
materiales, acordes con las necesidades
reales del presente y del futuro y que
alcance el nivel político que le corresponde por su importancia en la vida
nacional.
· Sistema Eléctrico Nacional. Estimaciones de Potencia y Energía
Eléctrica Período 1991-2010 [13]: Este
documento publicado en febrero de 1992 por la Oficina de Operación de Sistemas
Eléctricos Interconectados (OPSIS) es de carácter técnico de
planificación, elaborado por un grupo multidisciplinario del Sector Eléctrico
Nacional (SEN), luego de establecido el Sistema Interconectado Nacional (SIN)
entre las grandes empresas públicas y privada de suministro eléctrico y en
función de proporcionar una prospectiva más precisa del mediano y largo plazo
en las necesidades de energía eléctrica de la Nación, revisando las
proyecciones dadas en los documentos de política energética del MEM de 1979 y
1983 y ante los planes expansivos de las industrias petrolera y
sidero-metalúrgicas en Guayana (VIII Plan de la Nación).
Las lecciones aprendidas observadas en las estimaciones de
potencia y energía del período indicado son las siguientes:
1. Metodología de Estimación
de la Demanda de Energía: En este
estudio se utilizaron métodos econométricos de regresión por sector industrial,
residencial, comercial y oficial separadamente, por unidad de consumo, según
las informaciones estadísticas oficiales, en los cuales se utiliza el PIB y
otras variables macroeconómicas. Esta metodología anticuada sobre-estima las
necesidades energéticas, reproducen el pasado en el futuro y en consecuencia
causa grandes inversiones que no se van a utilizar. Desde los años 1980 existen
métodos de previsión de la demanda que consideran los hábitos, tendencias y
necesidades del consumidor en todos los estratos sociales, cambios tecnológicos
y que hoy día se usan en la mayoría de países [14].
2. Estimación Demanda de Energía Eléctrica Global: Para la elaboración de
este ejercicio de previsión de la demanda, se tomaron como referencia, la
generación bruta, el consumo facturado, la demanda y las pérdidas totales del
lapso 1976-1990, seleccionando cuatro años, encontrando que las proyecciones
hechas en 1979 (1978-2000) y en 1983 (1985-2000), en pleno boom de crecimiento
económico, estaban bastante exageradas. Incluso las proyecciones de la OPSIS en
demanda máxima para 2000-2010 en los escenarios Medio y Alto estaban bien por
encima de las reales (2000: 13.338 MW
/ 15.025 MW, frente a 11.938 MW; 2010: 18.601 MW /
20.574 MW, frente a 16.755 MW).
3. Estimación Demanda de
Energía Eléctrica por Sectores de Consumo: La estimación sectorial de la demanda está
discriminada por escenarios de crecimiento Bajo, Medio y Alto e incluyendo
desde 1992 el Sector Petrolero (SP), que hasta 1991 estaba en el sector
Autoabastecido. De un consumo global de energía de 44.759 GWh en 1990, se prevé
un incremento a 78.921 GWh para un
escenario Medio en 2000 y a 106.703 GWh
en 2010, los cuales están bien por encima de los consumos reales, absorbiendo
el Sector Industrial (Manufactura + Básicas de Guayana + Petróleo), el 62,1 % del consumo eléctrico en 2000 y el 57,8
% en 2010. Esto era imposible cumplirlo, tomando en consideración el alto nivel
de las pérdidas en redes de T&D.
4. Estimación de las Pérdidas en Transmisión y Distribución: Por la alta magnitud de las pérdidas,
las empresas CADAFE y ENELVEN presentan programas de reducción de pérdidas a 5
años, desde 1992 a 1997, con objetivos del 19 % y 12,5 %, respectivamente. Las
pérdidas reducidas se dividen en dos partes: aquella energía que pasa a ser
facturada y convertida en consumo (no técnicas) y la constituida por una
reducción en la generación de energía ocasionada por mejoras en las redes de transmisión
y distribución (técnicas). Durante el lapso 1976-1990, las pérdidas variaron
entre el 18,6 % y el 26,3 %. El plan
de la OPSIS era de llevar las pérdidas globales del SEN en el escenario medio a
un valor entre 12,3 % (2000) y 13,5 % (2010), el cual tampoco se cumplió.
· Documento Base del Plan Maestro Socialista
para el Rescate y Desarrollo del Sistema Eléctrico 2010-2030 [15]: Este documento base emitido por la empresa CORPOELEC en junio de
2010, aparte del alto contenido ideológico en su parte inicial y que no
interesan al análisis propuesto, incluye información de la situación actual y
las perspectivas de los sistemas de Generación, de Transmisión y de
Distribución Eléctrica, a 2009, diez (10) años después de haber tomado control
del SEV incluyendo la transición de cambios, la estimación de la demanda a mediano plazo,
el modelo de gestión del servicio eléctrico y las políticas de impacto
ambiental y de uso racional y eficiente de la energía eléctrica.
1. Situación Actual del Sistema de Generación: Las cifras corresponden a 2009, con
una capacidad de generación instalada de 23.708
MW, de los cuales 8.582 MW de generación termoeléctrica (36,2 %), 505 MW
generación distribuida (2,1 %) y 14.621 MW de hidroeléctrica (61,7 %). De la
capacidad termoeléctrica, hay un factor de disponibilidad del 65 % que
representan al nivel nacional 5.578 MW efectivos en 2009. 64 % del parque termoeléctrico posee más de 25 años de operación,
solo el 14 % tiene menos de 5 años en servicio. En el lapso 1999-2009 hubo un
incremento de 4.320 MW en capacidad instalada. Comentario: En
estadísticas del Centro Nacional de Gestión de 2009, la capacidad de generación
disponible es de 16.600 MW, lo cual
se esconde en el documento de la CORPOELEC, y la indisponibilidad de 7.108 MW en ambos parques de
generación, dando un 30 % de indisponibilidad global.
2. Situación Actual del Sistema de Transmisión: Hay un 38 % de subestaciones de 400/ 230/ 115 kV sin capacidad firme,
donde la demanda es mayor que la capacidad instalada. Para el día 10-09-2009 de
demanda máxima, el 85 % de las pérdidas técnicas fueron por línea y el 15 % a
través de transformadores. En general las pérdidas técnicas son el 5 % de la
potencia suministrada.
3. Situación Actual del Sistema de Distribución: Las redes en Mediana y
Baja Tensión están repartidas en un área de 375.523 km2, siendo el
sistema que presenta mayor déficit de
recursos, retardo en el proceso de
contratación, deficiencia
organizacional, fallas en redes y
subestaciones, tomas ilegales y
falta de información de la red en tiempo real. De 402 subestaciones de
Distribución al nivel nacional, 127 (32
%) poseen más de 35 años en operación. El TTI (tiempo total de
interrupción) en 2009 fue de 25,22 horas/año, el cual es 4 veces el promedio de
la América Latina. Las pérdidas técnicas fueron de 5,1 % (Zulia), 5,7 %
(Distrito Capital) y 11,9 % (Resto del país).
El 43 % de los circuitos en MT y
el 36 % de los trasformadores asociados a Sub-transmisión al nivel nacional
están sobrecargados. Comentario: Estos indicadores prevén una crisis
del servicio eléctrico a corto plazo,
con mayor intensidad en las épocas de mayor demanda.
4. Situación Actual del Sistema de Comercialización: Las pérdidas no técnicas o móviles en 2009 fueron de 36.202 GWh (38,4 %), lo cual equivale al 98 % de la generación térmica actual y el 63 %
de los ingresos del Sector Eléctrico.
5. Estimación de la Demanda 2010-2030: Este ejercicio de
previsión de demanda fue hecho con unas metas indeterminadas, sin Plan de la Nación de referencia que
lo soporte y con métodos econométricos
tradicionales, con tres escenarios base: Bajo (Crecimiento Moderado), Medio
(Plan de Desarrollo) y Alto (Desconcentración Territorial), con unas
pérdidas de energía del 11 % para cada uno de los escenarios, partiendo del
consumo total + pérdidas no técnicas del 2009 como base. Se hicieron las
estimaciones solo para los escenarios de crecimiento moderado (actual) y plan
de desarrollo, para 2015 (corto plazo) y para 2030 (mediano plazo), los cuales
se resumen a continuación: (2015): Crecimiento Moderado: 182.531 GWh; Plan de Desarrollo: 211.060
GWh; (2030): Crecimiento Moderado:
293.162 GWh; Plan de Desarrollo: 350.597 GWh.
Comentario:
Evidentemente que ninguno de los ejercicios de previsión se puede cumplir,
cuando se emitió en plena época de crisis energética severa manifiesta, con un
déficit de generación eléctrica creciente, un bajo crecimiento económico (4,4 %
interanual), unas restricciones no resueltas con el gas natural libre para los equipos con ciclo combinado y con unas altas
pérdidas no técnicas y sin plan de reducción de las mismas.
6. Perspectivas de Generación Eléctrica: Para proveer la generación respectiva a ese
horizonte, se estima usar las fuentes de energía primaria siguientes:
- Carbón (Zulia, Táchira)
- Coque de Petróleo (Anzoátegui, Sucre, Monagas)
- Hidroelectricidad (Guayana, Los Andes)
- Gas Natural (Zulia, Oriente, Centro, Capital)
- Energías Renovables Nuevas (Costa, Insular, Selva)
7. Perspectivas de Transmisión Eléctrica: No hay planteamientos específicos para corregir los
actuales “cuellos de botella” de la RTT.
8. Perspectivas de Distribución Eléctrica: No hay planteamientos de
cambios en los procesos de la inspección, la gerencia del servicio ni del
control en tiempo real del sistema y la reducción drástica de las pérdidas
eléctricas. Se plantea un cambio de paradigma en operación y mantenimiento, en
el cual cada comunidad es beneficiaria y participante directa en el proceso.
9. Perspectivas de Comercialización: El modelo de Gestión planteado no da cabida a la
corporación con metas y objetivos de prestar un servicio público de alta
calidad técnica, a costos apropiados, efectividad en la respuesta a las
comunidades y las actividades productivas y sociales que se desarrollen en el
país y sustentable con el medio ambiente donde opere. Es pura ideología.
3.6.
OPORTUNIDADES DE MEJORA DEL S.E.V.
Visto el panorama actual de la
Industria Petrolera y Petroquímica Nacional (IPPN), con cada vez menor
presencia en el Negocio Petrolero internacional, fuertemente endeudada por no
decir en condición inviable, afectada al nivel nacional por la reducción de
capacidad de producción y transporte por los eventos catastróficos y la falta
de mantenimiento adecuado de los últimos tiempos, para proveer los productos de
derivados del petróleo, las restricciones impuestas por el cambio climático en
la última conferencia COP 21° París en diciembre 2015, con reducción notable de la renta petrolera e
indisponibilidad de gas natural libre para su utilización en el mercado
nacional y además la falta de firmeza y de reserva del Sistema Eléctrico
Nacional (SEN) por el manejo inadecuado y falta de mantenimiento adecuado de
sus instalaciones desde inicios de la década de 2000, afectando ambas empresas
del Estado la seguridad energética de Venezuela, con un predominio partidista y
ajeno a su misión, improvisación, corrupción, carencia de conocimiento y
experticia, pérdida de capacidad de ejecución, deterioro del equipamiento,
pérdidas y pasivos en crecimiento y condición operativa límite, planteando las
acciones siguientes:
1. IPPN: En la transición de cambio de operaciones de
la Industria Petrolera al nivel nacional, mantener la continuidad operacional,
realizar auditorías técnicas multidisciplinarias de alto nivel especializadas, de
las instalaciones industriales de los procesos de producción, refinación y
suministro, manejo de gas, despacho de productos derivados, petroquímica, etc.,
bajo un programa jerarquizado según la criticidad y bajo criterios de
integridad mecánica y seguridad de los procesos, para determinar las acciones
correctivas prioritarias a la protección integral y ambiental del entorno. Así
mismo, eliminar las actividades no
medulares de la IPPN.
2. SEN: En la transición de cambio de operaciones del
Sector Eléctrico Nacional, mantener la continuidad operacional, realizar
auditorías y evaluaciones técnicas multidisciplinarias especializadas en
instalaciones de generación, de transmisión, sub-transmisión y distribución de
energía eléctrica en la búsqueda de fallas en desarrollo o latentes, por
personal operador y técnico especializado, según la criticidad asignada y obedeciendo
a criterios de integridad mecánica, seguridad, confiabilidad operacional,
protección ambiental, para determinar las causas raíces de falla y acciones
correctivas prioritarias a la protección integral del operador y del entorno.
3. SEV: Una profunda reestructuración en su
organización, funcionamiento, operación, y gestión que recupere sus objetivos y
sus valores originales, con un Ministerio de la Energía con mejores y mayores
recursos humanos y materiales que centralice todos los sub-sectores, como
organismo cúpula del Sector Energético, separando el Negocio Petrolero y
Petroquímico del Mercado Interno Nacional de Combustibles, gas natural, gas licuado,
fertilizantes, carbón, electricidad, calor, vapor como productos de los
procesos de energías primarias disponibles, para satisfacer las necesidades de
los Sectores de consumo Industrial, Comercial, Residencial y Oficial, a través
de las instalaciones, la gente y los procesos del Sector Petrolero Nacional (SP),
las empresas del Sector Eléctrico Nacional (SEN), la Coordinación de Fuentes de
Energías Renovables (Eólica, Fotovoltaica, Biomasa, Geotérmica, Pequeña
Hidroelectricidad), y otras Energías Alternativas (Carbón, Orimulsión, Nuclear),
con su política de precios y su marco regulatorio a través de un organismo de
suficiente autoridad central, la asesoría y participación del Consejo Nacional
de Energía, siendo abierta la participación de empresas de capital privado
nacional o exterior según las necesidades de capital y tecnología no
disponibles en la actualidad para recuperar la viabilidad del Sector [3].
4. Centro
de Investigación Energética Venezolano (CIEV): Desde la emisión del
Documento Rector de Política Energética de 1979, hasta el documento de la
Comisión de Minas del Senado de la República en 1992 se ha propuesto este
Centro de Investigación Energética del Sector de Energía Venezolano.
5. Gestión
Energética: El término de Gestión Eficiente de la Energía ha tenido difusión
en la IPN desde los años 1990, pero por falta de incentivos económicos no se ha
aplicado masivamente, sino asociado a la confiabilidad (bajos precios de la energía).
6. Estimación de la Demanda
de Energía: En los ejercicios de estimación de la demanda de energía desde
1979 al 2009 se han utilizado variables macroeconómicas con métodos
econométricos por regresión, en lugar de métodos
de previsión de la demanda que consideran los hábitos, tendencias y necesidades
del consumidor en todos los estratos sociales, cambios tecnológicos y que hoy
día se usan en la mayoría de países.
7. El
nuevo Sistema Energético Venezolano debe fundar una cultura organizacional de
alto desempeño, que permita recobrar las mejores prácticas de las industrias
energéticas más antiguas e incorpore nuevas prácticas actualizadas en gestión
eficiente de recursos y de ambiente y protección integral y de respeto general,
mediante [3]:
- Planificación del Sector Energético, alineada con la Planificación Económica General Nacional, soportada con las políticas energéticas aprobadas.
- Organización y Jerarquía del Sector Energético, haciendo cumplir los planes y programas de los Sub-sectores, incluyendo el mantenimiento de los equipos, la revisión y actualización de los precios y las tarifas de la energía.
- Formación y Desarrollo del Personal, a través del Instituto Técnico Venezolano del Petróleo (INTEVEP), del Centro de Investigación Energética Venezolano (CIEV), del CIED, CODELECTRA, Universidades Nacionales y otras instituciones de formación especializadas nacionales.
- Institucionalidad y Eficiencia, por medio de los organismos que componen el marco institucional y su responsabilidad ante la Nación, el manejo adecuado de las pérdidas y la Gestión Eficiente de la Energía.
- Soporte para del desarrollo nacional, mediante la conexión con los sectores productivos del país (Industria, Agricultura, Minería, Infraestructura, Ingeniería Nacional), el Servicio al Cliente, el Tiempo de respuesta.
- Sustentabilidad y/o Sostenibilidad, a través de la práctica de la Seguridad de los Procesos y de la Sostenibilidad Ambiental en los procesos de producción, transporte y distribución de la energía.
- Continuidad del Servicio, a través de la Confiabilidad del Servicio, el Abastecimiento adecuado, la capacidad firme y los márgenes de reserva.
- Transparencia y rendición de cuentas, mediante la información abierta de los resultados de la gestión, los costos de producción y los precios y tarifas.
- Apertura y Descentralización, incluye la integración de los mercados del gas y el eléctrico, el libre tránsito de la energía una vez se establezcan acuerdos regionales y la participación del sector privado en operación y mantenimiento de instalaciones del Sector
- Calidad de Vida para la Sociedad, por medio de la calidad del servicio prestado y de la integración con la Sociedad
REFERENCIAS:
[1]
Alexis Matheus. “La Electricidad y la Energía - El Caso de Venezuela”,
Cámara Venezolana de la Industria Eléctrica (CAVEINEL), II Edición,
Caracas, Venezuela, Junio 1978.
[2]
César Quintini Rosales. “Anotaciones para una Política Energética”, Ponencia
I Congreso Venezolano de Energía. Colegio de Ingenieros de Venezuela (CIV), 17
al 22 de septiembre de 1978, Caracas, Venezuela.
[3]
Juan M. Salas. “Alternativa al Modelo Actual de Gestión Actual del Sistema
Energético Venezolano”, CIV-24.171, Documento pdf, Marzo de 2016,
Maracaibo, Venezuela.
[4]
José Giacopini Zárraga. “1976-1985 Diez Años de la Industria Petrolera
Nacional”, Serie Décimo Aniversario. Segunda Edición. Coordinación
de Información y Relaciones de Petróleos de Venezuela, S.A., Caracas,
Venezuela, 1988.
[5]
Rodolfo Tellería V. “Historia del Desarrollo del Servicio Eléctrico en
Venezuela 1880-1998”, CAVEINEL/ Fundación Ricardo Zuloaga, ISBN
978-980-12-7091-1, Caracas, Venezuela, Julio 2014.
[6] Ascensión Reyes. “En tres años se
elimina el subsidio al sector residencial. Alza de las tarifas eléctricas es un
cortocircuito a la estabilidad”. Diario El Nacional, 03-01-1998,
Sección Política, pág. D-2, Caracas,
Venezuela.
[7]
Ricardo Escalante. “La nueva política energética nacional. Gobierno
eliminará subsidio de los combustibles”. Diario El Nacional,
21-09-1997, Sección Economía, Caracas,
Venezuela.
[8]
Inés Röhl. “Carlos Pérez Mibelli: 5 Mil Millones de dólares necesita
el sector eléctrico en los próximos cinco años”. Revista PETROLEO
YV, Año 6, N° 18, 2005, pp 59-64, Caracas, Venezuela.
[9] Nelson Hernández. “Fracturada la
Seguridad Energética en Venezuela”. Junio 2011, blog http://gerencia&energia.blogspot.com
[10]
Ministerio de Energía y Minas. “Documento Rector de la Política
Energética Venezolana”, MEM,
Caracas, Venezuela. Febrero de 1979.
[11]
Ministerio de Energía y Minas. “Documento Base para la Política
Energética Integral de Venezuela”, MEM, Agosto de 1983, Caracas, Venezuela.
[12]
Sub-comisión de Política Energética. “Documento Necesidad de una
Política Nacional de la Energía para
Venezuela”. Comisión de Energía y Minas del Senado de la República,
Coordinador Ing° Alexis Matheus, Asesor: Ing° Rodolfo Tellería, Agosto 1992,
Caracas, Venezuela.
[13]
OPSIS. “Sistema Eléctrico Nacional. Estimaciones de Potencia y Energía
Eléctrica Período 1991-2010”. CADAFE, EDELCA, ELECAR,
ENELVEN, Febrero 1992, Caracas, Venezuela.
[14]
José Suárez Núñez. “Los planificadores macroeconómicos se equivocaron. Guri sólo
desplazaría a Tacoa y Planta Centro”, Diario de Caracas, 28 de
febrero 1985, Sección Economía, pág. 22, Caracas, Venezuela.
[15]
CORPOELEC. “Documento Base Plan Maestro Socialista para el Rescate y
Desarrollo del Sistema Eléctrico 2010-2030”. 30 de junio 2010,
Caracas, Venezuela.